lunes, 30 de noviembre de 2009

BENDITA TV

Osé prender la tele durante el fin de semana para ver el partido de Del Potro, y me encontré con la típica publicidad pelotuda, en donde un tipo abre un vino supuestamente bueno, con unos amigos que comentan jocosamente “Que pasó? Que festejamos? Tu mujer perdió la tarjeta de crédito?”. “Noooo, ojalá” contesta el señor.
Es gracioso eso??? Simplemente no puedo soportarlo.

No tengo alma de ama de casa, no tengo alma de mujer mantenida portadora de tarjeta de crédito. No tapo problemas comprando cosas que no voy a usar. Ante una comida en grupo, solo levanto la mesa (como las demás mujeres) para no quedar como una maleducada. No pienso que eso sea lo que hay que esperar de mi género.

Una vez más, reitero que me revuelve el hígado cada vez que me veo forzada a participar de una conversación femenina que incluye temas como:
* Pañales, crecimiento, habilidades y/o desempeño escolar de los niños
* Shopping, supermercado, peluquería, gimnasio
* Electrodomésticos, decoración interior
* Dietas, celulitis y afines

Soy conciente de que esto me deja afuera del 90% de las conversaciones de las mujeres de mi generación. No puede importarme menos. Cada vez que vean mi cara con los ojos entornados, y me vean asentir repetidamente, sepan que mi curva de atención ya se fue al carajo, y que claramente estoy pensando que la conversación en la mesa masculina es más divertida.

Sí, ya sé que ya comenté mi malestar con anterioridad, pero la mencionada publicidad me dejó una vena latiendo en la frente. Seguiré enarbolando siempre mi bandera de “inadaptada”….

3 comentarios:

Diosa Danesa dijo...

Yo integro ese 90% hace más de 30 años!!! Siempre me sentí sapo de otro pozo con relación a los temas preferidos de las minas.... Tenés a quien salir, baby!

Nefertiti dijo...

claramente sigo tus pasos!! jaja

la amiga dijo...

Es terrible, pero gente experta, que estudió para eso y sabe a quien va dirigida su publicidad, lamentablemente, no puede estar equivocada...y de hecho no lo está, ya que se corrobora en las conversaciones de amigas... Igualmente , lejos las peores publicidades son las de jabones en polvo y afines...una tarea propia de mamá!